Tras 81 días llegamos al final de la vendimia 2021, y lo hacemos recogiendo la Tintilla en la Finca Laderas de Teno, en los altos del Valle de El Palmar, vendimias que comenzamos a finales del pasado mes de julio en Garachico, a nivel de mar, recogiendo la variedad Verdello, de ciclo muy corto que siempre es la primera en madurar. Entre una y otra ha sido el turno de Marmajuelo, Gual, Baboso Negro, Listán Negro, Listán Blanco, Negramoll, Vijariego Negro, Bastardo, Vijariego blanco, Moscatel, …
Nuestra orografía de elevada pendiente, donde los viñedos se ubican desde el nivel del mar hasta casi mil metros de altitud prácticamente dentro del monte, permite cultivar variedades de necesidades térmicas muy diferentes, con ciclos vegetativos dispares.
En realidad, el Noroeste de Tenerife, climatológicamente hablando es como si fuesen múltiples regiones climáticas unas sobre otras, lo que nos permite cultivar todas estas variedades muy distintas entre si que al final se traduce en un amplísimo abanico de vinos.
Por esta razón comenzamos la poda en enero, la terminamos en marzo, comenzamos la vendimia en julio y la terminamos en octubre, un hándicap para el cultivo una oportunidad para la imaginación y la creatividad.
Esta cosecha ha sido media en producción y excelente en calidad, entrando la uva en bodega con un estado sanitario inmejorable y muy buenos parámetros lo que se ha traducido en unas fermentaciones sin problemas y unos vinos que prometen.
El año comenzó con un buen régimen de lluvias, lo que favoreció un buen desarrollo vegetativo de las plantas, en algunas parcelas de cotas altas, lluvias persistentes en julio ocasionaron algún ataque fuerte de mildiu y luego en agosto otra semana con temperaturas anormalmente altas también nos generaron algún problema en otras parcelas dejando lo que a priori parecía una muy buena producción en un año de producción media.
Según hemos avanzado en la vendimia, entre la recolección de uno y otra parcela hemos ido cavando, incorporando el compost e implantando la cubierta vegetal de gramíneas, dejando todo listo para que los cultivos reciban las lluvias de invierno, mientras en bodega continuamos cuidando y mimando los nuevos vinos con la toda la ilusión que nos despiertan y con algunas novedades que iremos anunciando a lo largo del año.